Anda y habita en ese reino que ha llegado y que espera ser reconocido y reclamado por un número cada vez mayor de almas. Suplicas que venga Mi reino, que Mi voluntad se haga en la tierra; ahora deja de suplicar y exígelo. Las oraciones sin fe son algo vacío. Debes aprender a orar creyendo con todo tu corazón, con toda tu mente y tu alma, para que tus oraciones, sean cuales fueren, sean muy reales y concretas, y para que sepas sin duda alguna que están teniendo respuesta. No pongas límites a nada. No hay limitación en Mi reino, y Mi reino ha llegado, y en Mi reino todo es posible. Aprende a vivir más allá de ti misma y de tus limitaciones humanas. Vive en los ámbitos del Espíritu donde puedes hacer todas las cosas en Mi. Yo te fortalezco y te sostengo, por eso has de saber que YO ESTOY contigo siempre. ¿Cómo podría ser de otro modo, si YO ESTOY en tu interior?
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